El inicio del viaje


*~ El hombre solo tiene un sitio donde ser libre y es a través de sus pensamientos, que pueden convertirse en versos.*~


Este blog es un espacio que tengo para compartir con aquellos que gusten la poesía. Un poco de ésto, un poco de aquello y alguna que otra anécdota que traiga la melancolía.

¡Bienvenid@!




lunes, 9 de diciembre de 2013

Bloqueo

Muchas veces, más de las que puedo contar últimamente, mi vida llega a un recoveco, un punto no muerto, pero si inmóvil, como el famoso cero absoluto y me bloqueo.

No solo carezco de la facilidad de siempre para el verso, la prosa, el sentimiento no aflora al momento y las palabras se hacen un nudo en la garganta y no pueden salir.

Como si quisiera gritar, o esfumarme. Como querer llorar de agonía o de gozo. Ya ni siquiera sé si es cualquiera de esos sentimientos. Todo se ve estático.

Nada cambia. Aunque el muro gire vertiginosamente. Y entonces me doy cuenta que tengo un bloqueo. Leo más de lo que escribo, de lo que pinto de lo que imagino en mi mente que ahora, como siempre que me pasa esto está llena de números, de aforismos de la vida cotidiana, cosas que no trascienden y terminan siendo vanas.

Necesito un momento a solas. Necesito sacar todo lo que de pronto me impide imprimir en las letras todo lo que me ha pasado.

La pérdida, los re-encuentros. La nueva pérdida anunciada. Todo.

Quisiera sacarlo en gritos desgarradores a través de las letras, que ya no tenga ni por un segundo que seguirlo cargando en el corazón.

Pero al parecer no puedo.

Aún no estoy lista. Aún no fluye el verso que tanto añoro.

Los párrafos interminables que me llenaban el alma para poder seguir con vida, que me dan ese oxígeno sin el que me marchito lentamente.

Estoy más delgada. A veces quisiera decir que estoy también más fuerte.

Pero simplemente no lo sé.

Extraño los versos...

Tanto, añoro escribir una frase iluminada por la estela de la pasión.

Pero definitivamente tengo un bloqueo. De esos que te roban el alma de poeta, de trovador, de laúd. Para dejarte como una bóveda vacía, sin ninguna estrella tachonando su inmenso cielo.

Espero que pronto pase, porque sé que todo pasa. Solo espero que lo haga sin tanto dolor, y que, a pesar de todo lo que he vivido siga anhelando los versos, la inocencia de la vida. El amor.

Si, solo eso espero.

miércoles, 23 de octubre de 2013

Pensamientos y algunos escritos. Volviendo a las andadas.

Hola de nuevo a todos(as) los que se pasean por estos rumbos del ciber-espacio.


Siendo sincera agradezco a los que aún se pasean por este sitio, donde de vez en cuando escribo una nota sin sentido.

La verdad me encuentro aún en hiatus con la lectura, me atrasé muchísimo en éstos meses pero ya me pondré al tanto.

Por lo pronto solo dejaré por aquí un escrito que iba a mandar a un concurso, y siempre no vio la luz, también un poema que encontré arrumbado por ahí. Espero que lo disfruten.


La cita. 
Han pasado un par de minutos desde que me he despertado en la cama. No tengo  el más mínimo deseo por salir de ella. Pero suena de nuevo el despertador; tengo que levantarme, sé que hoy tengo una cita importante, con lo que se llama destino –supongo-.  Me levanto, sin saborear el sol que entra entre las cortinas de niebla que se cuelan en la ventana. Sonrío, casi puedo imaginar cada gesto tuyo esta mañana. Duele tenerte tan inalcanzable como te siento hoy. “Mañana será un día especial”, recuerdo tu voz, que anoche escuché a través del auricular. Yo solo solté un simple “si”, que nunca sabrás –pues llevaré el secreto a mi tumba- me ha costado mucho articular. Cuando supe la noticia el mundo se desbordó, algo se clavó en mi pecho robándose todo mi aire. Ahora, sin quererlo, he notado la foto de nuestro último viaje, esa que tengo en mi tocador. ¿Lo recuerdas? Aquellas montañas enclavadas en medio de la nada, esa solitaria luna, han sido las memorias más felices en los últimos años. Suspiro, un par de lágrimas caen de mis orbes, no puedo evitarlo, aunque me he prometido no llorar, dejarte ir por que el amor verdadero eso hace, sigo sufriendo. Me he prometido verte con esa sonrisa que siempre me ha caracterizado mientras cruzas el umbral perfectamente hermosa. Y no me verás a mí, tu mirada estará entonces clavada en otra persona: Soñando un futuro lejos de mí. Siempre me he preguntado, ¿Qué pasaría si la historia fuera al revés? Finalmente me levanto, me meteré a la ducha para acomodar mis ideas todavía dispersas. Siempre he sido una persona que sigue sus decisiones hasta el fin, tengo  que seguir así. Aunque me muera a partir de hoy que he decidido hacerme a un lado. Escucho el timbre del teléfono sobre el sonido del agua al caer. Sonrío, las lágrimas vuelven…Seguro eres tú.

Y ahí el verso.

Nuevo comenzar.

En este nuevo comenzar, siento que se va enardeciendo el aire. La llanura respira un leve susurro del océano, y me llega de lejos el eco de tu voz que clama mi nombre.

¡Cuánto hemos cambiado!

No estás tú ahí inmóvil al borde del camino, como me prometiste.
No te estoy buscando. Ya no suspiro ante tu recuerdo. Ya no me persigues.

Ahora solo ando adelante... con la frente en alto. Sin temores a un futuro que se atraviesa gritándome el ahora, susurrándome el mañana.

... Tú contigo.
...yo conmigo.

Ya no nos susurran las miradas o los versos.
El universo solo calla.


sábado, 5 de octubre de 2013

Mirar en la distancia.

Hoy no sé como debo sentirme.

Hay un dejo de nostalgia en mi corazón por tantas cosas que se han dejado atrás por las circunstancias que me ha puesto enfrente la vida. Es complicado de explicarlo directamente, de momento, por que todo sigue tan reciente, dejaré la explicación para después.

Algún día escribiré esas nuevas letanías, esos relatos que quizá inspiren la vida de alguien, que quizá desaparezcan en los miles de bytes que se generan entre las letras, me auto declaro todos los días a todas horas que las plasmaré de alguna forma. Pero sé que el tiempo no se ha dado para ello. No me lo he dado, porque aún no estoy totalmente segura de desear dejarlo. Comenzaré el ejercicio de auto-liberación pronto. Pero todavía no.

Así que por lo pronto a hacer recuento de los hechos, porque aunque a veces parezca lo contrario, no son daños...

Al abrir los ojos veo cuatro paredes distintas, veo un paisaje de colores armonizados, de alturas inequívocas, de imponentes nubes que se extienden.
Al abrir los ojos me descubro caminando por esas grandes -vaya que lo son- avenidas. Cruzando aquellos puentes, sonriendo a aquellos nuevos rostros.
Al abrir los ojos, el recuerdo de aquella crisálida mirada me envuelve. Parece que aún puedo sentir esa fragancia, cuando al ejercicio de cada noche -si es que el cansancio no me gana- puedo recordar tu tibio y seguro abrazo, que me dio entereza para tomar, ahora lo sé una decisión dolorosa...pero necesaria.

Al abrir los ojos.

Aún, de vez en cuando... busco en la distancia a aquél corazón que decidí, por su bien dejar ir. Y veo que le atormentan otros espíritus, le roban el sueño alguna tigresa mirada.

Hay una mezcla indescriptible de sentimientos. Me alegro, añoro, disfruto, agradezco...me entristece...


Al final del día. Cuando cierro los ojos...

Doy gracias a Dios que sigues con vida. Elevo una humilde plegaria, en un ejercicio por que me perdones...te perdones y seas feliz. Por que a pesar de todo, nunca he dejado de creer que lo mereces.

También trato de perdonarme, pero creo que esa es la parte que me llevará mucho, mucho más tiempo.

Si, la historia es distinta cuando cierro los ojos...


Trato de buscar un pretexto para no desear estar al lado de quien ahora me roba el sueño por temor a ser herida de nuevo. Pero termino enredando los recuerdos en el  roce de las miradas que es como una caricia para el alma.

Reviso mi día, como antes, solo que con mayor ímpetud y decisión. Todos los días han sido nuevos. Todos. La vida me ha dado la oportunidad de seguir creciendo, y deja en espera todo lo que ya está dado.

Me vienen imágenes de aquellos guardianes, de aquellas cascadas, de esos valles que se han quedado ahora tan lejos, y últimamente -en las últimas 24 horas- trato de darles las gracias por las bendiciones que me dieron, sin perder el punto en esa triste añoranza.

Recuerdo aquello que pude hacer más... por esos seres que se han quedado atrás para mí. Que he tenido que dejar atrás. Recuerdo y los pongo en manos de Su infinito amor, en la espera de que se de testimonio inherente de Él y Su Misericordia.

Rezo por los que extraño. Por los que me enseñaron, por los que sé que aún me aman. Por los que por algún motivo -fuera de mis posibilidades- han dejado de hacerlo.

Si, cuando cierro los ojos, aunque la nostalgia invade, aunque de pronto el dolor parte el corazón en dos por aquello que se quedó, que he soltado que ya no me pertenece...

Agradezco infinitamente a la vida, por traerme los regalos más insospechados de las formas menos esperadas.


El corazón que amo -porque nunca se deja de amar- comienza a sanar y a crecer en el auto aprendizaje, el auto descubrimiento. Se permitirá amar verdaderamente, buscará lo que le hará feliz, y será feliz, por que la vida solo nos trae abundancia y felicidad, si se lo permitimos.

El Gran Amor que jamás pensé tener tan cerca, está latente...no sé por cuánto, no sé como se desarrolle, pero está ahí, esperando a que los caminos coincidan, como intuimos lo harán de nuevo. Y me llega de gozo decirlo, o callarlo. Recordar un gesto o una broma. Y que me complemente incluso estando solo en el pensamiento.

Hay salud, hay vida.


Por que más allá del cúmulo de nubes que aún no se despejan en el horizonte, afronto la tormenta con entereza. Por que sé que detrás de las nubes hay un infinito, inexorable espacio con estrellas que guiarán mi camino de alguna u otra manera.

lunes, 15 de abril de 2013

Cerrando ciclos, tomando decisiones...Continuando el viaje...Hiatus

Hola que tal,

Como siempre te agradezco que te des un momento para leer esto que sale en momentos de ligeros delirios poéticos, de reflexión, y de aprendizaje, que en ocasiones me tomo en medio del trajín de la vida. En esta ocasión, aunque sigo leyendo no vengo a hacer una reseña de las impresiones que me ha dado un buen libro, más bien vengo a compartir un par de decisiones que he tomado recientemente, y que aunque no lo parezca cambian en mucho un montón de cosas que quiero hacer.

En éstos día he decidido hacer un punto y aparte a muchas cosas que me traían atorada para continuar caminando. Me ha costado un infinito trabajo, sobre todo porque en ocasiones nos sentimos merecedores (de una forma muy incorrecta) de las cosas malas o no tan buenas que nos pasan. Es muy fácil involucrarse en el dolor, en auto-convertirnos en las víctimas del cuento, cuando en realidad muchas de las situaciones que hemos vivido se han debido a nuestras propias decisiones o la falta de ellas.

Pero  bueno, hay que aprender a cerrar ciclos a permitir cicatrizar a nuestras heridas, que en ocasiones son muchas. Y sobre todo a amarnos porque tenemos la potencialidad de ser ese ser maravilloso, esa chispa divina que llevamos dentro en todo su esplendor.

Así que amigos, cuando una situación, una relación, una amistad no da para más, para ninguna parte...a cerrar el ciclo y dejar que entre el agua nueva.

Y como no quiero aburrirlos con mis auto-charlas filosóficas, les comento que tengo los libros en Hiatus hasta mayo (Porque de hecho no tengo libros ni en éste mes ni en mayo). Así que mi propósito de año nuevo tendrá que esperar un poco por motivos personales.

Ahorita estoy terminando Grandes Esperanzas de Charles Dickens, me faltan terminar de re-leer los de Marzo (que ya leí pero no he hecho reseña) y para Abril tengo un libro de una editorial independiente y me falta conseguir más.

Mayo ni idea de que leeré. Pero estoy abierta a sugerencias. Quiero leer a Murakami y alguna novela de Benedetti...en serio quiero. Pero a ver si junto el dinero para comprarme ese libro que tanto deseo en mis manos.

En fin. Creo que por lo pronto me retiro, envíen su buena vibra para que mis planes y proyectos personales me permitan seguir leyendo y sobre todo compartiendo con ustedes por estos rumbos.

Un abrazo.

martes, 12 de marzo de 2013

Acerca de algunas historias negras...

La luna se esconde de nuevo tras aquellos hilos móviles que forman las nubes. El rumor de un paso constante se escucha sobre la hojarasca esparcida al azar por el suelo. Ya no hay nadie en el bosque, los  sonidos de los animales están ausentes, no hay ni un ser vivo alrededor. 

O al menos eso aparenta el bosque.

En el sendero la hojarasca sigue crujiendo, hay un olor en el aire a azaleas, a frutas rojas del bosque. Sobre el olor se mezcla un hedor a podredumbre y el acompasado sonido en el camino continúa
.
Hay un susurro raro en el ambiente, no es el del bosque, no... es algo más.

Los hilos móviles se mueven, ya no hay rastro de la luna. Y aunque así lo parece...el bosque no duerme.

Mairim Zel.

"Escribir historias de fantasía para los más jóvenes es como enviar carbón a Newcastle. Por el carbón". - Neil Gaiman.

Después de mucho, mucho aplazarlo, finalmente me he dado el tiempo de escribir la reseña del libro que acabo de leer de Neil Gaiman. Era un libro que me ha prestado un buen colega mío, cuyos gustos en la literatura he de decir, son más que recomendables.

Es la primera vez que me encuentro con este escritor inglés que vive en los Estados Unidos y debo confesar que ha hecho que mi amor por los autores de su nacionalidad y de géneros similares al suyo -o iguales- aumente. Por lo mismo, he decidido añadirlo a la lista de libros a agregar en físico a mi biblioteca personal.

El libro de cuentos de Gaiman, titulado "El cementerio sin lápidas y otras historias negras" es simplemente arrebatador. ¿En qué sentido? Supongo que es el hecho de llevarte de un universo a otro en unas cuantas líneas, siempre me ha parecido una gran virtud literaria. Lograr construir la intriga, alegría, el temor que viene en el devenir de los hechos que acontecen en cada universo, darle consistencia para que alcance su punto máximo o clímax y cuando todo está listo caiga sutilmente, sin que lo sintamos al desenlace a veces obvio -casi todo el tiempo- que uno en su ignorancia e inocencia no había visto al inicio; de una forma que solo los virtuosos saben hacer.

Creo que leyendo sus líneas por vez primera, puedo calificar, desde mi muy personal punto de vista a Gaiman, como un as moderno en el cuento breve, o al menos en este primer encuentro me ha dejado cautivada. Ahora, no quiero alargar demasiado esta reseña (que tengo pendiente del mes de febrero) así que supongo es momento de pasar al punto clave de ésta publicación.

Y si lo notaron, haciendo honor al universo incomparable de Gaiman, he escrito mi propio intento de cuento breve a manera de introducción, mismo que espero que les haya agradado aunque sea un poquito. Debo confesar que no soy para nada virtuosa de éste tipo de historias, batallo mucho con escribir líneas y relatos breves. Pero espero de corazón que disfruten esta lectura y como siempre, agradezco que se tomen el tiempo para revisar las publicaciones.

Pero bueno, volviendo al libro de Gaiman, en sí los cuentos están orientados a un público juvenil, no por ello carecen de un valor maduro para quienes gustamos de la lectura sin discriminar edad o género al cual va orientado. Ahí tenemos al Principito, que en formalidad es un libro infantil, pero debido a la universalidad de su mensaje se ha convertido en un verdadero clásico.

Así que el público al que va dirigido el libro El cementerio sin lápidas y otras historias negras, no debe ser impedimento para disfrutar plenamente de las historias plasmadas en el papel por el autor.

El libro consta de 10 cuentos, una introducción de la pluma del autor, donde nos cuenta un poco acerca de la historia de él como escritor de relatos breves, y un apartado que pertenece al último cuento que se titula instrucciones, dentro del cual nos abre el preámbulo a una de sus historias, un poco más larga y espero tener en mis manos pronto para leerla.

Confieso que a pesar de lo esperado al inicio que como todo libro de cuentos -me ha pasado con alguno de Borges-, no todas las historias me engancharan. Sin embargo me gustaron casi todos, quizá solo hubo uno que no me atrajo del todo. Quiero enfocar esta publicación a los cuatro cuentos que me engancharon con mayor fuerza, para que conozcan un poco más del escritor, aunque sin spoilers espero.

El primero de ellos se llama El precio, habla de la historia de una familia que siempre rescatan o les llegan gatos a su casa sin que ellos los busquen. De entre esas criaturas felinas, llega sin previo aviso un gato negro. El mismo amanece cada día con heridas en el cuerpo, mismas que nadie se explica. Por ello el padre, la cabeza de la familia y también escritor, decide como hombre de la casa averiguar que le está pasando al gato. Por lo que una noche vela al gato en el portón de su casa para poder descubrir la verdad, sin imaginar a lo que se enfrentará casi frente a frente.

Otro cuento que me cautivó fue Caballería, en él se nos relata las cosas que una mujer mayor puede encontrar en una tienda de segunda. Hallazgo que puede hacer aparecer en su puerta a un caballero de la mesa redonda, quien le pedirá encarecidamente que se desprenda de un objeto que recientemente ha adquirido, todo eso en una semana, donde conocemos un poco de la vida de ésta señora -que bien podría ser mi abuela- que después de muchos años vive completamente sola. Me agradó la historia por que nos recuerda de cierta forma, como en ocasiones encontramos tesoros, que parecen no serlo y se encuentran frente a nuestras narices. Si les permitimos llegar, llegarán también aventuras que nunca hemos imaginado.

El penúltimo relato que retomaré se titula El pájaro del Sol. Este cuento nos habla de un club muy peculiar, el cual acostumbra probar todo aquellos que sea comestible, que pueda -de una forma u otra- degustarse y digerirse. En la última sesión de ese club, los especiales miembros se quejan de que al haber pasado tanto tiempo y haber vivido tantas experiencias culinarias, finalmente no les queda nada más que comer. Ante el reclamo general de la falta de algún manjar -y que algunos son ilegales como la carne humana- el más viejo de los asociados, mismo que nadie conoce con exactitud la fecha exacta desde que es miembro del club, les convida a realizar la cacería del mítico Pájaro del sol, cuyo exquisito sabor valdrá la pena cualquier gasto o viaje. Cumpliendo con los requerimientos  de tan curiosos y exigentes paladares. Todos los miembros deciden, luego de arreglar ligeras diferencias, embarcarse en la búsqueda del famoso mítico pájaro. Misma que, más que viaje imposible (como se esperaba fuera), resulta ser el camino de su inevitable e inesperado final, de aquella tan singular comitiva.

El último cuento que compartiré con ustedes es el preámbulo para otra historia más larga de Gaiman y por lo mismo, hay desde el inicio un sabor a inquietud, una nebulosa de incertidumbre y ansiedad que no te abandona en ningún momento.

Su nombre es La lápida de la bruja, y junto con la nota al final que dice "Instrucciones" es parte del inicio de otro relato del autor, que bueno, parece bastante prometedor y espero tenerlo en mi poder próximamente.  Al principio me costó un poco seguir el relato -no por la dificultad, sino porque el día que lo comencé tenía mucho trabajo, traté de distraerme leyendo y al final no logré concentrarme en una cosa ni en la otra- pero aunque me costó zambullirme de lleno en la lectura como hubiese querido desde el inicio, una vez dentro de ella la historia me atrapó y obviamente me dejó con un montón de dudas. La historia gira en torno a Nad, un niño humano vivo que lean bien, aunque no lo crean vive en un cementerio y es amigo de los muertos y fantasmas. El desea encontrar una lápida para su nueva amiga una bruja. Pero en su aventura se pone en riesgo y además el lector se da cuenta que hay muchos secretos en torno a su vida, a su desaparición y al porqué el chiquillo vive en el cementerio. 

Las historias son, como pueden darse cuenta muy pero muy recomendables. Pero, bueno, todo tiene un pero. Siento que aunque amé al autor de primera instancia, le falta trabajar mejor a los personajes femeninos. Algunos demasiado cliché, necesitan un retoque... o bien me hace falta leer un poco más de él, para poder afirmar que trabaja equitativamente a ambos géneros y que las chicas de las que escribe tienen el mismo ingenio y veracidad que los chicos (ya que casi todos los personajes principales de sus relatos son varones) de los que escribe. Por ello quizá creo que la nota que le corresponde es 9.2, muy recomendable, algunos finales me dejaron verdaderos escalofríos... y ahí radica el impacto de un buen cuento.

Si llegaron hasta acá gracias por leer, y nos vemos pronto para el reporte de impresiones de Grandes Esperanzas de Charles Dickens y algún otro librito de los que estoy leyendo para éste mes de marzo.

Un fuerte abrazo, y denme suerte vía electrónica para todos los proyectos chiquitos que traigo en mente.

M.Z.

viernes, 22 de febrero de 2013

...Y cuando las cosas llenan por completo la mente: "El Zahir"

Existen momentos en que algo que nos sucede, una persona, un instante, acapara toda nuestra atención, convirtiéndose  en el aire que respiramos, el agua que bebemos, la chispa que vivimos... una completa e inexplicable obsesión. 

En esas líneas se podría explicar un poco de lo que se trata el Zahir de Paulo Coelho. Comencé a leer la novela en febrero y de hecho la terminé antes que las primeras dos semanas pasaran. Tuve en mente terminar los otros dos libros, el primero era Grandes Esperanzas de Charles Dickens y el segundo -a falta del libro de Jane Austen (no logré conseguirlo en toda la ciudad)- estoy leyendo un libro de  cuentos de Neil Gaiman. El libro se llama El cementerio sin lápidas y otras historias negras.  

Lo malo es que a pesar de mis intenciones no he podido avanzar mucho en Grandes Esperanzas (mucho trabajo y poco tiempo) y el libro de Gaiman, voy bien de hecho ya lo terminé, pero no he podido colgar ambas reseñas. La razón, estas semanas tuve un par de entregas a concurso que no quise dejar de lado. Espero de todo corazón que se  abra alguna posibilidad en la literatura. Porque sinceramente quiero seguir intentándolo en ese mundo, aunque a veces algo cruel -como toda la realidad, casi siempre- Pero bueno, al tener esas dos entregas me dediqué en cuerpo y alma a corregirlas y terminarlas para enviarlas a las cedes de los concursos. Ahora solo a esperar el dictamen.

Por ello es que estoy atrasada con mis lecturas mensuales. Aunque ya tengo en mano los libros de Marzo, que serán en su mayoría para hacer honor al mes, de poesía. El primero me llegó como regalo caído del cielo el día de mi cumpleaños (aunque más que caído del cielo, llegó por paquetería desde mi ciudad natal): El amor, las mujeres y la vida del maestro Mario Benedetti. Además conseguí uno de Neruda, bastante vieja y un poco simple la edición. Canto General I, encima de todos estos encuentros, en mi búsqueda por una novela de segunda de Jane Austen, logré dar con un libro de la autora que leí en enero Mary Stewart Las Hilanderas de la Luna, se ve bastante bueno pero no me he dado el tiempo para leerlo.

Pero bueno volviendo al punto de interés, el libro de Coelho El Zahír me pareció bueno para la reflexión, me identifiqué con el personaje principal y en general creo que la historia lleva una buena cadencia, aunque al final me quedo con una cara de incógnita pues muchas cosas no las sentí finalizadas, y ese tipo de desenlaces me causan conflicto. Aunque eso es de forma muy personal, puede ser que haya quien -por otro lado- lo encuentre fascinante.

El libro, para quienes no lo conocen, trata de un escritor famoso (en ocasiones tendía a pensar en mi inconsciente que Coelho se reflejaba en su personaje, pero esa fue solo mi percepción), que está casado con una periodista muy reconocida,  la cual se dedica en cuerpo y alma a ser corresponsal de guerra. Dicha periodista desaparece, y el escritor en cuestión, que es también nuestro narrador, es el primer culpable de dicha desaparición sin explicaciones.

Desde su cristal, el narrador nos va adentrando a un mundo particular. Su mundo. Nos lleva a través de todas las etapas que debe  vivir al saberse solo -aunque el hombre siempre ha estado solo, desde su nacimiento- y cuando la mujer, ahora desaparecida, llena cada uno de los espacios en su mente, se convierte en su Zahir, entonces, solo entonces, entenderá que realmente la amaba.

De naturaleza libre (tendía mucho a verse involucrado con otras mujeres en otras relaciones), va recordando los momentos en los que aquella mujer que ahora está lejos de  él físicamente, le ayudó a crecer a dejar el cascarón de sus miedos y a convertirse en aquello que siempre quiso ser: un escritor famoso.

El libro, como les comento, tiene una cadencia hermosa, la forma en la que nos va llevando de la mano mientras las ideas del narrador -en este caso el propio escritor- van saltando en los tiempos. De su pasado al presente, considerando sus emociones y tratando de entrar, averiguar o intuir de lleno las emociones y pensamientos del amor ahora ausente, es simplemente más que rescatable.

De la historia en sí me llevo varias enseñanzas personales. A veces nos da terror tratar de alcanzar nuestros sueños y luchar por ellos porque resulta que tememos ser felices, no nos creemos merecedores de dichos regalos, aunque en realidad los merezcamos, sean parte de nuestro camino personal, e incluso nos estén esperando a la vuelta de la esquina, como es el caso muchas veces.

También me llevo el hecho indiscutible, que hay que dejar de ser para ser nuevamente. Estar siempre en equilibrio es una de las características puntuales que se puede rescatar de casi todas las obras de Coelho. 

Lo que por otra parte me encantó de este libro en comparación con los que había leído hasta el momento de él, es el modo en que aborda los celos y las relaciones personales entre los personajes. Muchas situaciones o algunas, me han pegado. Así que me llevo la enseñanza a la vida real, como debe de ser.

Me enganchó el libro, fue buena su cadencia, sin embargo, como menciono al inicio de ésta entrada, hay algo que no me termina de convencer. Como que algunas ideas no cuajan o simplemente deja muchos finales abiertos, muchas preguntas en el aire, que terminan sintiéndose incómodas, al menos para su servidora.

Fuera de esa inquietud, es una obra buena del escritor, no la mejor según mis estándares, pero es buena. Hasta la fecha mis máximos de él son por supuesto el Alquimista, El peregrino y Brida, en ese orden.

La nota para ésta obra sería de 8.5, por que a mi gusto particular esos cabos al aire que dejan bastante a la imaginación terminaron sin darle consistencia a la obra, misma que hubiese podido, desde mi humilde punto de vista alcanzar otras cimas que no se tenían proyectadas al inicio de la historia.

A pesar de ello lo recomiendo y si ustedes gustan de este tipo de obras, adelante. El Zahir de Coelho es para ustedes. Un último detalle que me gustó de la obra, fue el concepto del Zahir...

El Zahir es aquello que llena nuestras mentes, ocupa todos nuestros pensamientos. Puede ser cualquier cosa, o cualquier persona.

Creo que todos hemos tenido algún Zahir en determinado momento. Y eso es bueno, siempre y cuando lo dejemos ir y puede ser que en determinado momento vuelva a nosotros.

Me dio un gusto enorme finalmente compartir esta entrada, disfruten del mes de Marzo que al menos en esta parte del globo sus calidez ya se siente en el clima.

M.Z.

lunes, 11 de febrero de 2013

Febrero Loco...¿Que hay para leer?

Hola de nueva cuenta,

Ya que estoy sentada enfrente de la laptop, decidí hacer la entrada que tengo pendiente de éste mes. Febrero llegó haciendo estragos en el clima y en mi corazoncito cardiaco por tantas y tantas cosas que se me han atravesado últimamente.

Ya viene mi cumpleaños, el próximo viernes, lo que me pone, por así decirlo, bastante sensible. Es parte del show me digo, pero sigo estando sensible a todo esto.  Tengo menos de una semana para revisar el material que enviaré a uno de los concursos y no estoy tan segura de lograr al menos un lugar decente. Lo intentaré me digo a mí misma, pero aún así da miedo. El miedo paraliza, por lo que trato de enfrentarlo con un verdadero coraje que las cosas saldrán bien, siempre y cuando ofrezca de corazón aquello que amo, y lo convierta en una verdadera Ofrenda -otro aprendizaje del último libro de Coelho.

Así que fuera del estrés que tengo por haber aumentado mi carga de trabajo, me encuentro muy bien. Incluso en el trabajo he aprendido mucho últimamente, sobre todo en cuánto a relaciones interpersonales con otros.

Pero bueno a todo lo demás hay que echarle ganas, no queda de otra. En cuanto a todo eso de echarle ganas, quiero comentarles que ya comencé el primer libro del mes, y vengo a platicarle que libros serán aquellos que comprenderán el mes de Febrero.

Primero que nada, otro de Coelho, El Zahír -que hasta ahorita solo he logrado deducir que se trata de la historia de un escritor y una importante búsqueda.

Grandes Esperanzas de Charles Dickens.

Y aún no decido el otro. Quiero uno de Jane Austen, Sensibilidad y Sentimientos, o la Abadía de Northanger, quizá Emma, todo depende si consigo un libro de esos, por que sinceramente no quiero leerlo en electrónico.

Esos serían al menos los libros que leeré por este periodo. De los que espero poder hacer mis impresiones antes de terminar el mes.

Bien, creo que en función a literatura es todo lo que tenía que compartirles. ¿Qué hay para leer? Esos son los tres libros que éste mes cubrirán ese propósito de Año Nuevo que por suerte y constancia se está cumpliendo aunque poco a poco, con algunos problemas pero ahí va.

En cuanto a la escritura, comienzo el libro No. 2 de poemas al terminar la revisión del primero ésta semana. Y el fin de semana espero continuar la novela y el cuento. Y bueno espero tener noticias buenas próximamente. Por lo pronto ahora si es todo por ahora. Espero que este mes no los agarre algo locos como a mí, que me trae de un lado a otro, trabajando intensamente por los sueño y anhelos de un mejor futuro y el perseguir aquella Leyenda Personal que todos tenemos, y no se revela hasta el final a nosotros que solo seguimos las señales.

Un abrazo.

M.Z.

Febrero loco...avances y fin de Enero.

Hola a todos,

De antemano y como siempre gracias por leer éste pequeño espacio dedicado a pensamientos, a libros, a experiencias, a comentarios nacidos como impulso de aquellas solitarias o muy bien acompañadas tazas de buen té o café -Depende de lo que se dé en el momento-, siendo cobijada por aquél imponente, majestuoso y por que no decirlo, atemorizante coloso que es el Popo.

Y bueno, no deseo alargar mucho mi saludo. Solo debo decir que estoy contenta por todo, aunque más bien un tanto preocupada por lo que se me ha venido encima últimamente. Espero sinceramente que todo se componga en éstos días espero que las cosas de verdad salgan bien. Pero bueno, no deseo molestar con eso de mis problemas existenciales y no tan existenciales; por lo que mientras escucho a Lila Downs y una larga lista aleatoria en todos lo idiomas que me gustan,  vengo más bien a platicarles de mi última experiencia con un libro que terminé algo tarde a lo inicialmente programado, debido a una acumulación en mis responsabilidades cotidianas que se han visto aumentadas recientemente.

Pero como ya ha llegado el tiempo, me pongo al corriente con mi último comentario de libro que leí en parte de enero y terminé hace una semana aproximadamente. "El Manuscrito encontrado en Accra", de Paulo Coelho.

Debo decir que siempre me había considerado fan de las obras de Coelho, por que además que son "sencillas", tienden a  remover con facilidad estados internos muy arraigados y que nos permiten, de una o de otra forma comparar nuestro propio momento, nuestro yo que está disfrutando en ese instante de la lectura, con el de los protagonistas de sus obras, e incluso, por que no decirlo, sentirnos plenamente identificados con él.

Así había considerado sus obras, hasta la última que leí de él completamente El Alquimista, después me encontré en el camino con El Aleph, me gustó, quizá fue por la forma en que me recordó a Borges -me atrajo de inmediato a ese Aleph donde todas las cosas convergen y se deforman-, y retomamos ese momento metafísico tan especial en que todo cae en un mismo punto y nos abre la realidad de nuestras esencias divinas. Pero a pesar de esa excelente impresión, debo confesar que el libro no me conquistó, como lo habían hecho todas las demás obras de él.

A causa de "El Aleph" me acerque con cautela al Manuscrito encontrado en Accra. Sé que el libro no debe ser juzgado por la portada, pero, en ocasiones los escritores pasan por rachas, donde la obra de alguna forma imposible a mi punto de vista pierde el brillo de la originalidad -eso siento que fue lo que le sucedió  al Aleph-.

Aún así, disfrute del libro, y dentro de sus caprichosas letras encontré uno que otro mensaje que invariablemente me tocó en todo lo que había vivido hasta ese momento. Pero bueno. Poco después que terminé el Aleph, se cruzó el libro de "El Manuscrito encontrado en Accra" y ahí es donde comienzo éste escrito que comparto con ustedes hoy.

El manuscrito encontrado en Accra, es a mi parecer una guía de enseñanzas, es como si muchas cosas importantes que nosotros  consideramos, o que están ocultas en la sabiduría de cada uno de los hombres con sus esencias divinas, se encontrarán en un solo libro.

Debo decir que desde las primeras páginas, a pesar de carecer de una historia de trasfondo y fuerte como las anteriores, me encontré completamente cautivada por el libro, que en muchos puntos me recordó con intensidad el estilo del Manual del Guerrero de la Luz.

Un manual de acción, que más allá de quedarse simplemente para vivir confinado en un estante, a veces repleto, a veces vacío, empolvándose, es más bien un paso a paso para mejorar significativamente nuestra consciencia humana de lo que es trascendental, importante y que en ocasiones, muy a nuestro pesar olvidamos.

Es un libro que -como todo aquella lectura que me cautiva- no quería que terminara. Quería que continuara aflorando eternamente, y además, me encontraba estudiándolo más de una vez, deteniéndome en alguna página interesante, o simplemente disfrutado del hecho de que todo puede ir más allá de ese mar de palabras y convertirse en un pensamiento que se materializa luego en acto.

Han sido pocos los libros que -en plena consciencia de que toma más tiempo- me he detenido en medio de la lectura para escribir alguna línea o retomar alguna cita.

Habla de cosas comunes, eso sí, pero que a la vez, en medio de toda la tecnologías actuales, se vuelven situaciones importantes, para las que jamás estamos del todo preparados.

Algunas citas que realmente me llegaron, que quizá los anime a leerlo, las comparto a continuación, esperando que las disfruten.

"La amistad es un acto de fe en otra persona, y no un acto de renuncia."

"La amistad tiene las cualidades de un río: rodea las rocas, se adapta a los valles y montañas, a veces se transforma en lago hasta que la depresión se llene y pueda continuar su camino. Porque así como el río no olvida que su objetivo es el mar, la amistad no olvida que su única razón de existir es mostrar amor por los demás."

"No importa cómo te estés sintiendo, todas las mañanas levántate y prepárate para emitir tu luz."

"Cuando llegue el momento de mostrar tu Ofrenda a los demás todos se quedarán admirados y se dirán unos a otros <> Nadie preguntará cuánto costó conseguirlos. Porque quien trabajó con amor hace que la belleza de lo que realizó sea tan intensa que ni siquiera puede ser percibida con los ojos. Así como el acróbata vuela por el espacio sin demostrar ninguna tensión, el éxito, cuando llega, parece la cosa más natural del mundo. Mientras tanto, si alguien se atreviera a preguntar, la respuesta sería: pensé en desistir, pensé que Dios ya no me escuchaba, muchas veces tuve que cambiar de rumbo y,en otras ocasiones, abandoné mi camino. Pero a pesar de todo, volví y seguí adelante, porque estaba convencido de que no había otra forma de vivir mi vida. Aprendí que puentes debía cruzar y qué puentes debía destruir para siempre. ¿Qué es el éxito? Es poder irte a la cama cada noche con el alma en paz"

"Al atravesar un  periodo difícil, recuerda: aunque hayas perdido grandes batallas, sobreviviste y estás aquí. Eso es una victoria. Demuestra tu alegría, celebrando tu capacidad de seguir adelante. Jamás pierdas tu capacidad de demostrar amor. Este es el más peligroso de los obstáculos, porque trae en sí una cierta aura de Santidad: Renunciar a la conquista solo entienda la propia dignidad quien fue capaz de honrar cada uno de sus pasos. "

"Más allá de las montañas que separan las tribus, más allá de la distancia que separa los cuerpos, existe la comunidad de los espíritus. Por lo tanto, los enemigos no son los adversarios que fueron puestos ahí para probar tu valor. son los cobardees que fueron puestos ahí para probar tu flaqueza."

No quiero aventarme una entrada kilométrica citando el libro, por lo que les comentaré un poco de lo que trata el libro. El libro es una traducción de un manuscrito encontrado en la ciudad de Accra. Este manuscrito encontrado en una ciudad llamada Accra, en una región cercana a donde habían sido encontrado los Evangelios Apócrifos, en donde un sabio griego se dedica a responder las preguntas del pueblo de Jerusalén en la víspera de la conquista por los cruzados.

Según lo escrito por el autor en el libro, el manuscrito realmente perteneció a un Arqueólogo que lo encontró  en Egipto, y al cual tuvo acceso por la copia enviada por el hijo de Sir Walter Wilkinson, -nombre del arqueólogo-. Que sea o no cierto no lo aclara, pero sinceramente, la forma en que te trae de nuevo tantas reflexiones acerca de temas tan cotidianos y/o escabrosos como la Soledad, de la que afirma entre otras cosas "La soledad no es la ausencia de compañía, sino el momento en el que nuestra alma tiene la libertad de conversar con nosotros y ayudarnos a decidir sobre nuestras vidas." 

Entre muchas otras citas, por las que sinceramente vale la pena leerlo. Si bien la historia no tiene una historia intrigante, carece de fuerza en su escritura y en la fuerza con la que una excelente narración te envuelve, debo decir que es un libro con muchas frases, que se vuelven herramientas claves para nuestra evolución constante como seres humanos. 

Nos recuerda, por medio de un relato que casi parece una parábola de tiempos de Cristo, lo que es importante e invariable, sin importar si se trata del año 1099 o el 2013 que vivimos actualmente.

Por ello, creo que calificaré ésta obra de dos formas, por el impacto que podría tener su contenido y por la trama y el impacto literario independientemente. Espero que no les moleste.

En el impacto del contenido, como enseñanza para los que quieran ver que está fallando en su escala de valores, que les hace falta mejorar que podrían hacer para disfrutar la vida más plenamente le pondré un 9.0, si bien tiene mucha enseñanza, en ocasiones creo que es mucho para un solo libro, porque hay bastante información por apartado. Pero fuera de ése pequeño detalle toda esta parte está perfecta.

En cuanto al impacto literario, como se desarrolla la trama como obra literaria, creo que sinceramente el estilo de Coelho decayó. Le pondría un 7.0, por que el recordar la pasión y entrega de Brida, la forma tan humana en que se reflejaba Santiago el pastor en sus temores y anhelos, en su decisión de buscar aquella lejana Leyenda personal, y compararlo con éste nuevo libro, simplemente carece de ésa fuerza. No hay lágrimas evocadas por alguna línea de A Orillas del Río Piedra me Senté y Lloré, no hay esa frase que te cambia internamente y es determinante para muchas cosas de tu vida, como en el Peregrino. Pero hay un buen desarrollo de contenido. Como un compendio de aquello que es valioso para las vidas humanas, más allá del tiempo y las formas de las eras.

Esas serían mis "cortas" impresiones del libro de Coelho, El Manuscrito encontrado en Accra. Bueno para el aprendizaje constante, pero no tan fuerte literariamente hablando. Creo que haré otra entrada platicando un poco de lo que nos espera para éste próximo mes.

Nos vemos muy pronto.

M.Z.

martes, 22 de enero de 2013

La Cueva de Cristal

¡Hola de nueva cuenta!

Debo disculparme por estar desaparecida últimamente, pero estoy preparando un material para un concurso nacional de poesía, así como la apertura de un pequeño negocio local,  -extra a mis dos trabajos- por lo que no he tenido suficiente tiempo de escribir, y bueno la Novela ha estado tan intensa que me ha quedado ganas de no terminarla, por lo que decidí deliberadamente reducir mi velocidad de lectura para que las últimas líneas me duraran un poco más.

Pero como era de esperare, me fue imposible postergar más el final, en parte porque está muy interesante y en parte porque por más que trate de leer lento, termino leyendo a mi velocidad habitual. Pero bueno. Acá estoy de nuevo, reportando mis impresiones del libro, de forma similar a como lo hice con La Dama de las Camelias.

Les comento que fue justamente hoy cuando he terminado de leer "La Cueva de Cristal" de Mary Stewart, publicada en el año de 1970 en Londres por  Hoder & Stoughton Limited, la traducción de Maria Antonia Oliver.

Y bien, ¿Por dónde comienzo? Quizá lo más sano sería contextualizar a la escritora o a la novela en sí. Para iniciar, el relato se trata de una historia escrita hace más de 42 años, -eso sin considerar los cambios pertinentes en la traducción- por lo que se presentan algunos detalles o palabras para las que hay que tener a la mano, un buen diccionario o conexión a la red para buscar aquellas que no entendamos. Recomiendo siempre darle una ojeada al mapa que viene incluido en el material, por que sinceramente ubica a los "No Ingleses", como yo que soy latinoamericana, del contexto espacial-geográfico de la obra.

A pesar de la diferencia de años, y de escenarios tan distintos como es la Inglaterra medieval, el relato es exageradamente atrayente. Sin menospreciar ningún trabajo que ha pasado por mis manos en otros momentos, la historia está muy bien lograda y te atrapa desde el comienzo: así de simple. Espero tener la oportunidad de leerlo algún día en inglés porque estoy segura que lo disfrutaré tanto como he disfrutado la traducción, que he de decir está muy bien lograda. Tiene fluidez, y una que otra nota -no está llena de notas por todos lados lo que permite la lectura fluida- que te aclara lo esencial que podría confundirnos durante nuestra lectura.

La autora, tiene la delicadeza de ofrecernos una líneas a modo de Nota, que termina de facilitar la comprensión de la dinámica, el ritmo de la novela en sí, por lo que la obra sinceramente la recomiendo mucho, si bien, es un ejercicio de la imaginación de la escritora, -es decir, no es un trabajo histórico como tal- debo decir que tiene una cadencia muy bien lograda, aunque en mi caso particular, sentí que hizo falta un poco más.

Pero bueno, vayamos a comentar las impresiones generales de la obra. Trataré de ser breve, pues no quiero arruinar alguna sorpresa dentro del libro para quienes se animen al final a buscarlo y leerlo.

La Cueva de Cristal, habla de la niñez  y juventud de Merlín, - sí, ese Merlín del Rey Arturo, el que ayudó en su momento a Ambrosious a coronarse rey, el que desapareció atrapado por los encantos de una mujer de la cual se enamora según cuenta la leyenda- todo relacionado con una cueva muy especial, donde conocerá a su maestro y que sin darse cuenta, tiene que ver incluso con su concepción.

La novela está dividida en cinco libros, y un prólogo más o menos largo. Durante éstas líneas nos desglosa la historia, narrada directamente por Merlín a través de su especial mirada, como si él mismo, atrapado en la vejez recordara aquellas etapas ingrávidas de la niñez, y las sórdidas e imborrables impresiones de su juventud.

No voy a contarles lo que nos platica la autora de la niñez de Merlín, porque sería arruinarles la sorpresa. Solo les comentaré que nuestro querido personaje,  habiendo nacido bastardo -es decir, que no posee un padre legítimo que lo haya reclamado como suyo (imagínense el estigma que lo perseguía en ese tiempo)- vive una serie de "aventuras" y enseñanzas que aunados al mítico "poder" que obtiene por vía directa de su madre, le permite crecer y sobrevivir durante muchos años.

Durante la  juventud afronta pruebas muy fuertes, y apoyado por aquél poder, que viene cuando él más lo necesita, pero que no es algo que logre manipular, sale siempre adelante. Descubre la verdad de su concepción, y el estado de "bastardo" que le ha perseguido toda la vida, además de fortalecer las enseñanzas y esa peculiar capacidad para guiarse por el "destino", "llamado de Dios", en todas las decisiones que le aquejan durante ésta etapa otra etapa.

No necesitando a los hombres o mujeres a su alrededor a partir de cierta edad, las reflexiones de Merlín, el niño, el joven, o el adulto nos identifican con lo más profundo de nosotros. Estoy segura que, como me ocurrió, se sentirán identificados al menos una vez con él.

Eso es todo lo que les comentaré del guión general de la historia. Ahora quisiera enfocar mis pensamientos y palabras en la narrativa desarrollada por Stewart. Debo decir que me sorprendió, como aunque no tenía familiaridad con los lugares, me envolví completamente en sus detalladas descripciones, que si bien no caen en lo monótono, te mantienen en ese estado de ensoñación, donde casi percibes el frío de la estación mientras caminas por el campo, que ya no tiene flores, crispados por el rocío de la neblina y cobijada por esas nubes que a lo lejos en las montañas, te vigilan incesantemente.

La descripción verdaderamente te transporta, sin caer en lo aburrido. Sin perder el contexto, logras mirar a través de los ojos del mísmo Merlin, y llegas a querer lo que por él es querido y a despreciar aquello que ha llegado a hacerle daño. El hecho que en el mismo texto -sin que te des cuenta- te aclara los nombres y las variantes lingüísticas que se presentan en cada región, de acuerdo a la situación social-política que en ese momento se desarrollaba, te ayuda a sentirte acompañado e involucrado, sin que haya un glosario que vuelva la lectura un tedio.

Y bueno, ya para concluir la forma en la que la autora une detalles, de la leyenda original, con el personaje de su imaginación, te dan la pauta para realmente sentir cercano a éste Merlín, que vivió una niñez y una juventud, al igual que todos los hombres.

Mago, profeta, príncipe, ingeniero. Todas las facetas del personaje te cautivan, desde aquello más humano, como sus temores, -que aunque no son descritos específicamente, se advierten en un lugar más profundo, lo que los hace más sinceros todavía- y sus anhelos humanos y como herramienta del Dios.

Ya no quiero alargarme más, -créanme podría hacerlo- por lo que creo que dejaría una calificación de 9.3 al libro, su único punto para un puntaje más alto según mi humilde opinión hubiese sido un desarrollo posterior del Merlín adulto, por el hecho que las últimas líneas te dejan con ganas de ver más esa historia por tantos contada -novelas, libros, cuentos, obras cinematográfica y de la pantalla chica- a través de los ojo de Stewart.

Sinceramente espero que quienes tengan acceso a éste libro lo lean, créanme no se arrepentirán. Espero no haber hecho este análisis muy largo, muchas gracias por tomarse el tiempo para leerlo, espero compartir con ustedes las impresiones del libro de Coelho en éstos días, quizá el fin de semana.

Tengan una excelente resto de semana donde quiera que estén. Recuerden que se agradecen comentarios y las visitas y si tienen tiempo vayan a visitar el mundo oculto en "La Cueva de Cristal"

M.Z.




jueves, 17 de enero de 2013

La dama de las camelias

Hola que tal a todos.

Hace ya varios días terminé  de leer La dama de las Camelias de Alexandre Dumas (hijo), debo decir que no había posteado mis impresiones personales del libro por falta de tiempo. Muchas personas -quizá- no lo sé bien, ya saben de que va el libro, la relevancia que tuvo su creación para que años después apareciera "La Traviata" con música de  Giussepe Verdi y libreto de Francesco Maria Piave... una ópera que en lo personal me encanta, pero que por desgracia nunca he tenido el placer de ver en vivo. Espero verla pronto.

Pero bueno, para las personas que como yo no sabían que ésta ópera está basada en este libro, se los comparto, que en su momento, me fue muy grato descubrirlo, entre otros detalles que igual comparto para que se animen a leer este título que merece estar en sus bibliotecas.  Pero bueno, vamos a las impresiones.

En un inicio debo declararme culpable, encontré el libro bastante "plano", tuve problemas para verme totalmente involucrada en el tiempo o contexto que el escritor estaba desarrollando. Fue tedioso, como si la parte inicial del relato careciera de veracidad. Luego, cuando leí un poco más del contexto histórico en el que se desenvolvió la creación de la historia comprendí por qué.

Pasando este momento de fastidio, que sinceramente no duró mucho tiempo, comenzó el relato lleno de intensidad y de pasiones, aderezado con el lenguaje propio de la época -estamos hablando de 1852- que sin darnos cuenta, dice cosas que incluso en la actualidad tienen validez. Bien podría tratarse de éste año -1852- o del 2013, cuando el libro hace referencia a actitudes tan humanas que para sorpresa de quienes vivieron en aquellos tiempos, no han cambiado en prácticamente nada.

Desde ideologías, hasta comportamientos humanos. Claro siempre hay variantes, pero sinceramente en lo esencial, en pocas cosas hemos evolucionado como sociedad. Pero bueno, estoy deteniéndome mucho en las impresiones creo que vamos a comentar un poco más respecto a la historia.

La novela en sí habla de una cortesana -mujer de la vida galante- que vive en París. Margarite Gautier, es una joven que bien podría ser considerada duquesa, por la actitud y las habilidades sociales que posee, sin embargo, tiene conocimientos que van más allá de lo que una dama de sociedad tendría, ya que es la -querida- de los hombres más ilustres de la ciudad de las luces.

Sin embargo, la historia no habla propiamente de su vida, -la cual si se comenta, pero muy someramente- o de sus relaciones con los hombres, duques y condes de la región. La historia se centra en la etapa en la que Margarite conoce a Armand Duval, un joven de buena familia -no tiene una fortuna considerable- que se enamora perdidamente de Margarite, quien de una u otra forma le corresponde.

Si bien, se trata de una historia de amor, el relato se adereza con momentos de reflexión para la constitución humana que todos poseemos. Margarite abandonará muchas cosas, que solo al final son esclarecidas, además de encontrar su propia reivindicación en la enfermedad mortal que la aquejará: en el dolor.

Armand por su parte, vivirá un suplicio, que siempre será salvado por el amor puro que logró sentir por su Margarite, que pasa de ser la cortesana o querida a convertirse en su amante.

No quiero contarles más de éste clásico, porque sería destrozarles el libro. Sin embargo se los recomiendo ampliamente. Existen algunas palabras que por no ser de la época, ¡Vamos estamos hablando de 1852! Podrían ser difíciles de comprender, pero para eso tenemos diccionarios, o en extremo caso Google :D

En mi escala de impresiones creo que le daré un 9.0 a la novela, el inicio como digo me pareció un poco flojo, pero el hecho que la novela estuviese inspirada en un personaje real que conoció Alexandre Dumas y estuvo enamorado de ella, cuyo nombre es Marie Duplessis le dió un plus y en cuanto comenzó a relatar la relación de Margarite y Armand (me imagino que inspirado por sus propias relaciones) hubo una intensidad y pasión que te mantienen al borde de la silla y sin querer abandonar la lectura.

Esto es todo por ahora, espero el fin de semana completar las impresiones de Merlin, y ésta semana comienzo a leer a Coelho, para compartir con ustedes mis impresiones. Recuerden que se agradecen sus comentarios y el tiempo que toman para leer lo que escribo.

Tengan un excelente fin de semana, y porqué no...escapénse a leer "La dama de las camelias" de Alexandre Dumas.

M.Z.

sábado, 12 de enero de 2013

Rincón con sabor a nostalgia.

Hola que tal.

Luego de comenzar este nuevo ciclo -con un nuevo año-, y que las cosas, dentro de todo lo que me aqueja están fluyendo bien, aunque algo lentas este mes, me he decidido a escribir una entrada de los libros que he leído.

Desgraciadamente, durante años he dejado este tan buen vicio mío que es la lectura por el simple placer de perdernos unos momentos en un universo alterno, con historias y sentimientos, que sinceramente se parecen tanto a los nuestros. Por lo tanto, creo que comenzaré este espacio o sección hablándoles un poco de ¿cómo llegué a interesarme en los libros?

Definitivamente todos, tenemos un libro, que nos adentra de lleno a la lectura. Que nos abre el panorama a la posibilidad de buscar más allá de lo que se te pone enfrente. A mí me pasó algo muy interesante durante mi niñez. Aunque como algunos de los que están por ahí afuera, tuve unos padres que les gustaba mucho leer, que me contaban cuentos infantiles cuando estaba a punto de dormir, -no los de Disney, sino los originales- y me gustaba leer la poesía y los textos, fue un día cuando tenía como 9 o 10 años que una novela en la tienda atrajo mi atención. El libro se titulaba "Un embrujo de Cinco Siglos" de Ana María Güirales, un libro que fuera de mi país utilizan mucho en la enseñanza básica, pero que en México no tenía mayor trascendencia que una novela de importación para rellenar los estantes de la lectura de jóvenes

Este cuento nos adentra a la historia de una brujita, una princesa bruja que debe enfrentar un castigo importante y vivir un viaje muy significativo por romper los esquemas o las leyes de su  mundo. Un cuento bastante corto, ideal para quien se inicia o acerca por primera vez al mundo de las letras, pero también con enseñanzas profundas acerca de como estructuramos nuestra realidad a ciertas normas, que no porque todos las den por ciertas son totalmente válidas. Habla de la aceptación de los demás, del aprender de los errores, del perdón. Sacando al humano de contexto en la historia, enviándolo a segundo plano, logra de una forma contundente, humanizar todo el relato, darle la valía que los hombres tienen por simplemente poseer la virtud de lograr sentir amor profundo, perdón para quienes te dañan, empatía por los que te rodean, paciencia y bueno la lista sigue y sigue.

Si gustan de historias divertidas, ligeras y con toques infantiles que esconden gran significado, -además de un contexto algo mágico- realmente les recomiendo sin importar la edad que la lean. Aunque esto que les cuento no es más que la experiencia de alguien que hace bastantes años vivió.

Como decía, este fue el primer paso que me adentró en el mundo de las letras. El primer libro que yo pedí para mí a la joven edad de 10 años. Obviamente y conforme fui creciendo hubo muchos otros que me marcaron, algunos de formas más profundas, otros dejando un par de enseñanzas que nunca borraré de mi recuerdo, o algún consejo que he tenido la dicha de llevar a la práctica para mejorar mi vida.

Espero en algún momento escribir algo respecto a esos significativos libros. Por ahora me limitaré a contarles la experiencia lectora de éste año concreto. Como parte de mis propósitos he decidido hacer una lectura mínimo de 3 libros al mes. Adicionales a aquellas que mi trabajo y mi profesión me piden. Obviamente al ser libros técnicos no creo que haya interés por comentarlos jajajaja.

Espero poder hacer las reseñas de éstos libros al final del mes, para compartirles mi opinión al respecto. Y bueno en enero, tengo planeado concluir los siguientes libros:

La cueva de cristal de  Mary Stewart - Una novela escrita originalmente en 1970-
La Dama de las Camelias de Alexandre Dumas (hijo)
El Manuscrito encontrado en Accra de Paulo Coelho

Además de los planeados, estoy leyendo los que siguen:

De poesía:

Antología Poética. Pablo Neruda -Publicada por la Real Academia de la Lengua Española, hasta ahorita voy en los ensayos que comentan la vida y obra del autor. Muy recomendable.


Otros:
Antología de Cuentos de Jorge Luis Borges Vienen los más representativos del escritor
Compartir el patrimonio cultural inmaterial - Compilación de Lourdes Arizpe (Pertenece a las ciencias sociales, pero sinceramente me ha fascinado el libro y los temas) a grandes rasgos habla de la reunión latinoamericana de Patrimonio Cultural Inmaterial que se dio en mi país, y sinceramente se tocan muchísimos puntos que pienso todos deberíamos conocer.

Eso es todo por ahora. Sigo escribiendo pero ya no lo he publicado y no creo que lo publique pronto por acá. También la semana que entra comienzo a retomar mis pinturas. Hay que darse tiempo para todo ¿o no? En fín.

Espero no haber aburrido mucho a quien se pasea por éstos solitarios rumbos, gracias por tomarse el tiempo en leer lo que publico.  Cualquier comentario será bien recibido.

Un fuerte abrazo.

M.Z.

viernes, 11 de enero de 2013

Resistiendo la tentación

Hoy es tu cumpleaños, y yo he decidido no hablarte desde hace meses.

Como me está costando trabajo, quizá sea esta naturaleza mía.

Pero  no tengo más que hacer.

Tú tus decisiones,
yo las mías...

Y aunque nadie ha muerto,
parece que el luto nos cobija.



Si, en medio de un cielo que sigue
llenándose de falsas estrellas.


Pero a seguir.

Hoy seguro saldrá una buena poesía de estas líneas.


martes, 1 de enero de 2013

Sigo esperando ese grito de auxilio...

Y sigo esperando ese grito de auxilio.

Esa llamada a que sigo en sus pensamientos.

No sé por qué no puedo arrancarle del corazón.

E inevitablemente sigo esperando su llamada de auxilio.

Y mi milagro.




Pero no llega...

Probablemente nunca llegue.

Y lo sé, pero aún así lo sigo esperando.


M.